Tejiendo, siempre tejiendo…
En este intento por conectar, por integrar y seguir el camino hacia la plenitud del Alma, he llegado a la conclusión de que es mas fácil decir que hacer. Crear las condiciones internas para cambiar aquí, allá, por el otro lado y en todas partes, reconociendo que necesitamos mejoras, y que lo que nos rodea es solo la manifestación de lo que tenemos dentro, requiere de mucho esfuerzo. Muy rápido nos llega la fatiga y preferimos no hacer nada.
Y es que el cuerpo, el ego y la mente, se resisten, y saben muy bien cómo hacerlo, nos hacen la batalla tan estratégicamente, tan discretamente, que hasta llegamos a pensar que estábamos equivocados, que realmente no necesitamos cambiar. Y nos inventamos formidables excusas para mantenernos en nuestra zona de confort.
Aunque dentro nuestro haya una vocecita que nos grite, que nos suplique, que despertemos, que hay algo más, que busquemos, que no nos cansemos, preferimos aumentar el volumen de la radio para escuchar nuestra canción favorita o degustarnos un cremoso helado. Nos hacemos de oídos sordos y volvemos a creer que lo tenemos todo, nos conformamos con leer mensajes positivos y re postearlos en las redes sociales, no creemos seres positivos que viven “felices”. Y si bien es cierto que esto es estupendo, pues nos mantiene en una vibración armoniosa, no menos cierto es que la teoría, para que sea efectiva , siempre debe ser llevada a la práctica.
Puede que quien lee estas líneas, ya conecto, que sus emociones estén balanceadas, y que ya no necesite cambiar, ni reinventarse. Si es así, desde el centro de mi corazón, pido al Padre Creador que se conviertan en la luz que guía dentro de tanta bruma y descontento. Que su ejemplo sirva de inspiración para los que seguimos en la búsqueda de la re conexión con lo más elevado de nuestro Ser.
Pero para los que todavía estamos en el campo de batalla, aprendiendo y desaprendiendo, logrando victorias y superando nuestro fracasos, nos exhorto a que no dejemos para mañana reformular nuestras vidas. No permitamos que nos pasen los días volando, mientras esa caminata matutina, se queda para después, mientras esa terapia de sanación que tanto aporta a nuestras vidas la colocamos en un “Wish List” eterno.
Meditemos, practiquemos el silencio, unamos nuestros corazones, pidamos al Padre creador nos de la fuerza para seguir intentándolo, a la velocidad que podamos, pero si con la constancia necesaria para no rendirnos, sabiendo esperar y retomar. Con sabiduría, paciencia y prudencia.
En Taller 11:11, te invitamos a que permitas que fluya en ti la creatividad, que conectes con la Madre Tierra, que abras tu corazón, que no te canses, que no desistas, y que puedas seguir tejiendo tus sueños, que juntos podamos seguir TEJIENDO, SIEMPRE TEJIENDO. Conecta 11:11, Conecta con tu Ser.
MiliZen.